Home staging y sus ventajas

Una puesta a punto estratégica (y económica) puede agilizar la venta de una casa hasta ocho veces. Te damos las claves del ‘home staging’ la estrategia que gana adeptos en España.
La compra y alquiler de una vivienda es un proceso en parte racional y en parte emocional. Una vez que el comprador haya seleccionado el barrio, el tipo de casa, el precio y otros factores racionales, empieza la búsqueda por internet. En este momento, el comprador elige a base de fotos. Si la vivienda en venta no tuviera fotos o las fotos fueran malas, la casa será directamente descartada. En cambio, unas buenas fotos atraerán a muchas más visitas.
El home staging, técnica importada de Estados Unidos, aterrizó en nuestro país coincidiendo con la crisis económica. Significa literalmente puesta en escena de la casa. La técnica para acelerar la venta de tu vivienda.
Despersonalizar, ordenar, despejar, limpiar, reparar, organizar el espacio y armonizar.
El trabajo del Home Stager consiste en utilizar estas técnicas para resaltar los puntos fuertes y minimizar los puntos débiles de un inmueble. Por lo tanto, no se trata de esconder los defectos, sino de arreglarlos. Tampoco se trata de decorar la casa, ya que la decoración es algo muy personal y en el caso del home staging el objetivo es convertir la vivienda en un sitio neutro y acogedor en el que la mayoría de los visitantes se sientan cómodos. Este sistema ofrece varias ventajas tanto para quien vende como para quien compra, por eso su auge en el mercado inmobiliario.
Te damos 8 trucos rápidos para que pongas a punto tu vivienda. ¡Toma nota!
1. Potencia su atractivo, ya desde el exterior.
Si tu vivienda es un chalet o es muy exterior, está claro que los potenciales compradores empezarán a juzgarla por su fachada, el estado del jardín, los buzones… cualquier detalle cuenta. Pero incluso si se trata de un piso, lo más interior posible, cualquier elemento desde la entrada tendrá importancia. Por eso, aunque se trate de zonas comunes, trata de adecentar –limpiando, pintando o sustituyendo- cualquier elemento que no se encuentre en perfecto estado.
2. Limpia, ordena y arregla los desperfectos.
Es básico ofrecer una imagen absolutamente higiénica: barre, friega, aspira, elimina cualquier mancha de suelos y paredes, deja brillantes ventanas y espejos. Asegúrate de que no hay ningún mal olor en la casa y, al contrario, coloca ambientadores con aromas suaves pero sugerentes. Deshazte de cualquier objeto decorativo que sobre, pues menos es más. Asegúrate de que todos los elementos de la casa funcionan. Revisa que las ventanas cierren bien, que no haya bombillas fundidas, baldosas partidas, grifos que gotean… Tú ves una pequeña reparación, tu cliente verá trabajo que tendrá que reparar él mismo.
3. Neutro no quiere decir soso.
Redefine el estilo. ¿En qué consiste esto? Pues en dotar a la vivienda de un estilo que guste al mayor número de personas posible. Es decir, tiene que ser un estilo neutro, acogedor y actual. Sin estridencias ni objetos muy personales y llamativos. Puedes plantearte pintar las paredes de blanco, o de gris. O quizás dar un toque de color en algún lugar en concreto. Apostar por los colores neutros que den sensación de mayor amplitud y luminosidad. Se trata de que cada persona que entre en el apartamento pueda imaginarse viviendo ahí. Que pueda apreciar las múltiples posibilidades que tu piso les ofrece.
4. Actualiza tus muebles.
Es interesante hacer una evaluación del mobiliario y evitar que la casa tenga demasiados elementos decorativos. El objetivo siempre debe ser que las estancias parezcan lo más grandes posibles, que aparenten una distribución personal y que sean sencillas para que inviten a los clientes a imaginarse espacios a su gusto.
5. Flores y más flores.
Los jarrones con flores frescas son siempre una pieza decorativa muy agradable. Si te es posible, compra un ramo sencillo de tulipanes rojos y colocados en un bonito jarrón. Las velas son tus mejores aliadas. Colócalas por toda la casa para decorar, menos en la cocina y en el estudio o despacho, si tienes. Recuerda tenerlas encendidas cuando vengan tus clientes, aunque sea de día. ¡Tu vivienda debe estar vestida!
6. Tres es el número mágico.
Es el número mágico en decoración. Tres detalles formando un conjunto son el grupo perfecto. Dos quedarían pobres y cuatro serían demasiado. Nunca nos cansaremos de decirlo: no hay nada como el color para transformar un espacio. ¡Una verdad como un templo! Y más en el salón, que es el más visto y vivido de casa. ¿El secreto para no pasarse ni quedarse corto? Usar como muchos tres colores.
7. Cuida los textiles.
Ha llegado el punto más divertido. Ahora sólo te queda colocar las piezas decorativas necesarias para dar calidez a la vivienda. Hemos comentado que es necesario desaturar el espacio, pero tampoco es bueno que la vivienda esté vacía porque dará sensación de frío. Nada de dejar las ventanas sin cortinas, el sofá sin cojines… Y sobre todo nunca enseñes un dormitorio con la cama sin hacer, tanto si tu vivienda es para vender como para alquilar.
8. Reportaje fotográfico.
Una imagen vale más que mil palabras. Un buen reportaje fotográfico captará la atención de potenciales compradores e inquilinos y hará que más gente se fije en tu inmueble. Haz que tu vivienda luzca lo que realmente vale.
Además toda información es poca a la hora de vender rápido. Con un plano, tus potenciales clientes podrán, además, hacerse una idea de la distribución de la casa.
El home staging ha ganado adeptos en España en los últimos años en el mercado de la compraventa de viviendas de segunda mano. Según un estudio de la Asociación de Home Staging España, se pueden acortar el plazo de venta de una casa a menos de 38 días con estos servicios, unas ocho veces más rápido que la media nacional.
Consúltanos sin compromiso. Nuestros profesionales elaborarán un proyecto que se ajuste a tus necesidades y te ayudaran a dar valor a tu vivienda.